Violencia infantil.
A tan solo unas horas del hallazgo de los restos mortales del pequeño Gabriel me pongo a escribir estas líneas que ahora teneis ante vosotros.
Esta no es una reflexión como las demás, es más bien una crítica no a las fuerzas y cuerpos de seguridad del Estado si no a la clase de escoria capaz de hacerle esto a un niño.
Si bien negarle del preciado derecho de la vida a cualquiera es una de las peores acciones que se puedan cometer, a un pobre niño que ni alcanzaba la década es todavía peor.
Es un niño indefenso, que difícilmente podría dar problemas a nadie, menos aún dar motivos para quitarle la vida.
Nuestros padres siempre nos decían que no nos acercaramos a extraños, pero cuando la tragedia y la desgracia vienen de una mano cercana, el dolor no va si no en crescendo.
Pero este no ha sido un caso más. Día a día y semana tras semana, nos hallamos con una variedad aterradora de casos de violencia contra menores. Secuestros, asesinatos, pornografía infantil, tráfico de organos...
Supone una larga lista de ejemplos de lo cruel que puede llegar a ser la raza humana por un simple beneficio económico en el mejor de los casos. Otras solo un simple capricho .
Estas serán con poco riesgo a equivocarme las líneas que más me cueste escribir nunca.
Es por ello que debemos pararnos y pensar qué carajos estamos haciendo cuando somos capaces de hacer tanto daño a un ser tan inocente.
No hay razonamiento alguno que justifique ni remotamente esta forma de actuar.
Si no somos capaces de actuar en consecuencia, esto es algo que se repetirá constantemente.
Un ser, por llamarle de alguna forma, que traiga tanto sufrimiento de forma tan repentina, no será capaz de arrepentirse de sus actos, menos de reinsertarse en la sociedad.
Es por ello que desde aquí, doy mi opinión a favor de las penas de prisión permanentes y de la pena capital.
Desde aqui, me despido por hoy.
Tengan buenas noches .
Edito: Estaba tan indignado que se me había olvidado ponerle título a la entrada.
Esta no es una reflexión como las demás, es más bien una crítica no a las fuerzas y cuerpos de seguridad del Estado si no a la clase de escoria capaz de hacerle esto a un niño.
Si bien negarle del preciado derecho de la vida a cualquiera es una de las peores acciones que se puedan cometer, a un pobre niño que ni alcanzaba la década es todavía peor.
Es un niño indefenso, que difícilmente podría dar problemas a nadie, menos aún dar motivos para quitarle la vida.
Nuestros padres siempre nos decían que no nos acercaramos a extraños, pero cuando la tragedia y la desgracia vienen de una mano cercana, el dolor no va si no en crescendo.
Pero este no ha sido un caso más. Día a día y semana tras semana, nos hallamos con una variedad aterradora de casos de violencia contra menores. Secuestros, asesinatos, pornografía infantil, tráfico de organos...
Supone una larga lista de ejemplos de lo cruel que puede llegar a ser la raza humana por un simple beneficio económico en el mejor de los casos. Otras solo un simple capricho .
Estas serán con poco riesgo a equivocarme las líneas que más me cueste escribir nunca.
Es por ello que debemos pararnos y pensar qué carajos estamos haciendo cuando somos capaces de hacer tanto daño a un ser tan inocente.
No hay razonamiento alguno que justifique ni remotamente esta forma de actuar.
Si no somos capaces de actuar en consecuencia, esto es algo que se repetirá constantemente.
Un ser, por llamarle de alguna forma, que traiga tanto sufrimiento de forma tan repentina, no será capaz de arrepentirse de sus actos, menos de reinsertarse en la sociedad.
Es por ello que desde aquí, doy mi opinión a favor de las penas de prisión permanentes y de la pena capital.
Desde aqui, me despido por hoy.
Tengan buenas noches .
Edito: Estaba tan indignado que se me había olvidado ponerle título a la entrada.
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